En algún sitio extraño ser. Respiro
recuerdos a través de fosas nasales, que parecen ojos de tanto parpadear.
Extraño ser camino de senderos pasados, amanecer todos los días sabiendo que no
volverá el tiempo atrás.

Quizás extraño ser en las noches
eternas que apagan el día, cuando el mundo se esconde en un ombligo. Hago
alarde de mi ridícula esperanza con esta boca sin lengua. Seca, sin sabor. Que
se cae de la cama. Bailo en la sombra sin forma de un prisma multicolor. Danzo
con sudor de penas y escalofríos de Sol.
El viento, de a ratos a favor,
extraña ser. El viento en contra, en cambio, golpea y suelta sus brazos cuando
las rodillas no quieren caer. Brota en mi piel las heridas que nadie quiere
lamer.
En algún sitio extraño ser. Mi pecho
está lleno de hojas. Rayadas, secas. Y sin remedio continuo en el eterno
camino, que no es.